Hoy os traemos una campaña publicitaria de carácter social basada en anuncios impresos.
Long live New York es una organización no gubernamental dedicada a animar a los residentes de la ciudad de Nueva York a inscribirse para donar órganos. Pese a tener casi 4 millones de personas donantes registradas, la ciudad de la gran manzana ocupa el último lugar de los Estados Unidos en cuanto al porcentaje de personas dispuestas a donar sus órganos, siendo a su vez la tercera ciudad con más pacientes a la espera de un trasplante que mejore o salve sus vidas. De ahí nace la necesidad de dar relevancia a la donación de órganos mediante una publicidad que pueda llegar y captar al máximo de personas posibles
El objetivo de los carteles era incentivar a que la gente tomara conciencia de que con tan solo una firma se puede ayudar a más de una persona y cuán útil puede ser ese simple gesto una vez nuestros órganos ya no nos sirven.
La campaña fue desarrollada por la agencia de publicidad Y&R New York gracias a las fotografías tomadas por Zombie Studio, obteniendo unos resultados visuales de gran impacto.