En el contexto de competitividad actual dentro del sector retail no vale únicamente atraer al público con descuentos, sino que es fundamental proporcionar a los compradores una atmósfera de entretenimiento y brindarles una experiencia de compra positiva. En este punto, hay dos factores clave para aumentar las ventas: uno es un excelente servicio al cliente y el otro es el visual merchandising o escaparatismo. Esto último suele descuidarse especialmente en empresas pequeñas en las que el dueño hace las veces de vendedor, contable, responsable de compras, gerente de marketing, reclutador, formador, etc. Y el diseño de escaparates queda olvidado en la parte inferior de la lista de cosas que hacer.
En este post queremos daros algunos consejos para crear un visual merchandising efectivo, capaz de atraer clientes y multiplicar las ventas.
Tener un plan
Antes de empezar a mover cualquier cosa es interesante invertir tiempo en diseñar un plan maestro. Sin plan corremos el riesgo de modificar algo y crear un efecto dominó incontrolable que dé como resultado algo que no deseamos.
El plan puede ser garabatear un dibujo de cómo queremos que sea o escribir una descripción detallada, así como anotar pensamientos e ideas.
Pensar como un diseñador
¿Te has preguntado alguna vez por qué hay escaparates tan bonitos? No hay magia detrás, todo se reduce a la comprensión de los elementos y principios del diseño. Todos los diseñadores, ya sean diseñadores de interiores, estilistas, artistas, diseñadores gráficos o paisajistas, utilizan estos principios de diseño en su trabajo.
Los elementos del diseño son la línea, la dirección, la forma, el tamaño, el color, el tono y la textura.
Los principios del diseño son la repetición, la unidad, el contraste, el ritmo, el equilibrio y la armonía.
En otras palabras, conceptos y guías básicas para la organización visual que nos proporcionarán excelentes resultados si los tenemos en cuenta.
Contar una historia
¿Qué queremos contar? Los seres humanos procesamos la información de forma mucho más sencilla cuando se trata de una historia.
Para crear una historia necesitamos pensar qué producto en concreto queremos destacar. El escaparate siempre debe contar una historia clara y convincente, ya que es el primer punto de contacto con el cliente. Para empezar a desarrollarla es básico plantearse tres preguntas:
¿Cuál es mi historia?
¿Qué colores elijo?
¿Qué técnica empleo?
Mantener el orden
Debemos asegurarnos de que nuestra tienda queda libre de obstáculos y expone fácilmente los artículos de compra por impulso y los productos seleccionados. El uso de material gráfico para punto de venta como expositores de producto o mobiliario impreso puede sernos de gran ayuda.
Mejorar el ambiente
Podemos crear una experiencia de compra atractiva y sutil apelando a otros sentidos: empleando un perfume determinado, reproduciendo música o agregando la luz adecuada.
En cuanto a la iluminación, recomendamos utilizarla para resaltar los puntos focales yendo con cuidado para no deslumbrar e intentando no colocar los puntos de luz justo encima de los productos para no producir sombras antiestéticas.