Como parte del patrocinio de la Final Four de la NCAA, la liga universitaria de baloncesto de los Estados Unidos , Coca-Cola Zero y la agencia de publicidad Ogilvy & Mather instalaron un cartel interactivo muy ingenioso.
En él, la Coca-Cola Zero fluía a través de unos tubos para deletrear las palabras «Taste It» (Pruébalo). Entonces el líquido se desplazaba desde la parte inferior de la valla publicitaria a un área de cata con seis surtidores donde la gente podía degustar la bebida.
Mediante más de 75 válvulas, cuatro bombas de alta presión y 16 sensores, la cartelera empujaba líquido y aire a través de los tubos para que pareciera una pajita sorbiendo.
Esta campaña de street marketing es la primera acción de Ogilvy desde que ganó el concurso el año pasado.
Otra acción para animar a más gente a probar Coca-Cola Zero tenía como objetivo poner una botella de la bebida en la mano cada espectador. Junto con Shazam, la app de identificación de canciones, Coca-Cola creó anuncios de televisión potable que vertían Coca-Cola Zero directamente en los teléfonos de los espectadores que usaban la aplicación en ese momento.
Cada interacción era recompensada con un vale por una bebida que los usuarios podían canjear en las principales tiendas minoristas de los Estados Unidos.
Esta tecnología se amplió a la publicidad por radio y a publicidad impresa inteligente, transformando los dispositivos de los oyentes y espectadores en vasos y botellas.