Muchos diseñadores gráficos no disponen de demasiados recursos para publicidad, por lo que el boca a boca y las referencias son una parte importante del éxito de un pequeño estudio o un profesional independiente.
Seguir estos cinco consejos puede ayudarle a dejar una sensación de satisfacción en el cliente que provoque que este hable de usted como una buena opción para aquellos conocidos que necesiten una solución de diseño gráfico.
Póngase el sombrero de hombre de negocios
Esto puede parecer algo intuitivo, sin embargo muchos diseñadores y artistas en general no le dan demasiada importancia a la hora de impulsar un servicio profesional. Muchas veces cuando un creativo deja una empresa grande no tiene en cuenta la infraestructura que esta le proporcionaba generando y gestionando una buena comunicación con los clientes.
Si usted es un trabajador independiente, o de un pequeño estudio, será el único responsable de devolver los correos electrónicos y las llamadas telefónicas de forma oportuna. Asegúrese de que esto suceda y no espere hasta el viernes para devolver un correo o una llamada que recibió el lunes.
Tenga la capacidad de escuchar
Usted no tiene que ser el psicoterapeuta de sus clientes, pero debe estar preparado para escucharles. El servicio al cliente es muy importante: el cliente quiere sentir que sus quejas y peticiones están siendo escuchadas. Esto no sólo asegurará que su cliente se sienta perfectamente atendido sino que le ayudará a descifrar qué quiere y cómo, y así realizar un producto idóneo para él.
No diseñe algo que su cliente no ha pedido
Puede que sea un diseñador con una gran vocación artística pero no entregue a un cliente algo que no ha pedido. Cuando emprenda un proyecto de diseño debe dejar su ego de lado, de lo contrario podría perjudicar la relación con el cliente ya que no sólo va a sentir que ignoró sus objetivos, sino que va a perder mucho tiempo y dinero en revisiones.
Tenga paciencia
No odie a sus clientes. Si usted es capaz de reflexionar sobre el hecho de que le pagan por hacer algo que ama, esto se reflejará no sólo en la calidad de su trabajo, sino también en la forma en que sus clientes lo perciben. La gente no quiere trabajar con gente desagradable, aunque posea un gran talento. Ha habido muchos diseñadores talentosos y creativos de los que se ha prescindido al no tener la capacidad de querer lo que hacen y apreciar a sus clientes.
Administre las expectativas del cliente
A veces puede ser muy aterrador decir no a los clientes, sobre todo cuando hay dinero de por medio. Sin embargo, es mejor decirle a un cliente que algo no es posible a prometer que lo es y entregar un mal trabajo. La honestidad es la clave cuando se trata de satisfacer al cliente. Si el alcance de un proyecto va más allá de sus posibilidades y es capaz de exponerlo, en la mayoría de casos lo entenderá y lo valorará como una muestra de sinceridad muy positiva.