El diseño del escaparatismo de un comercio es una tarea que combina el aspecto estético y el técnico para conseguir llegar al público. A veces estas técnicas de visual merchandising no acaban de funcionar porque simplemente se aplican sin analizar las características específicas del negocio de retail.
En este post queremos daros alguna información para poder mejorar la calidad de la composición de los escaparates con algunos conceptos interesantes a tener en cuenta.
Considerar el color
Utilizar un solo color pude parecer una opción llamativa pero suele pasar desapercibida con el tiempo. Lo mismo ocurre con la adición de demasiados colores o elementos de visualización: el desorden hace que sea difícil llamar la atención de forma controlada e invitar a ir más allá. Lo ideal es elaborar los escaparates con uno o dos puntos focales que destaquen y sirvan para dirigir la mirada del público.
La constancia es fundamental
No es suficiente tener un visual merchandising perfectamente elaborado. Si hay polvo o suciedad en los estantes, maniquíes u objetos expuestos el único mensaje que llegará a los clientes potenciales es que no le importa nada.
Es imprescindible un buen mantenimiento y realizar protocolos de verificación para garantizar unos estándares satisfactorios.
La altura de los ojos
Una buena premisa a la hora de disponer los productos en el escaparate es colocarlos a la altura de los ojos de una persona de estatura media. Esto servirá para llamar la atención y os servirá para jugar con las alturas e intercambiar las posiciones los productos menos vendidos para darles más visibilidad.