Tras el enorme éxito de la pop up store instalada el año pasado en el centro comercial tokiota Isetan, el diseñador de ropa masculina de Louis Vuitton Kim Jones regresó a estos grandes almacenes de la capital nipona para configurar otra tienda temporal de retail.
Pero esta vez, la pop up store de Louis Vuitton se enfocó de forma distinta, poniendo a la venta artículos de edición limitada. Una selección comisionada por el diseñador, productor, músico y gurú de la moda japonés Hiroshi Fujiwara.
La colección fusionaba moda casual con accesorios de alta gama, incluyendo artículos de ropa, bolsos, pequeños artículos de cuero y carcasas de iPhone. Todo, obviamente, debidamente adornado con el icónico monograma de la firma francesa.
Para la confección del espacio se emplearon adhesivos para suelo así como vinilo impreso, que sirvieron para reforzar el branding del lugar. También se utilizaron letras corpóreas para rotular la entrada a la pop up store con el nombre de la marca.
Finalmente se recurrió a la impresión sobre madera para crear tres grandes círculos con el logotipo de Louis Vuitton en ellos. Esto fueron colgados en el escaparate para ser observados desde el exterior.